domingo, 11 de diciembre de 2011

Desatada.

Momentos de oscuridad extrema, en los que no eres capaz de ver más allá de ti mismo, en los que todo te importa una mierda y solo sabes compadecerte y abrumarte por una culpa sin sentido que llega a destiempo. Desgana y apatía por todo, sentimientos agrios, que te recuerdan que no eres nadie y que a nadie le importas un carajo. Sentimientos de incomprensión en los que te sientes sustituida y rechazada de manera estúpida. Que no haya nadie ahí que sepa decirte lo que quieres oír es frustrante. Dolor, profundo, interno y eterno que se expande y rompe en oleadas de hiel  helada que arde en las venas, el corazón y ante todo, en el alma. Y aquí viene de nuevo ese sentimiento infame que vuelve de hielo los corazones de los hombres, sentimientos encontrados y luchas imposibles entre titanes indestructibles que pujan por acabar con todo lo que un día fue importante y crucial y que ahora, ya no importa. Momentos como este, en los que me dejo llevar, en los que mi mente está en blanco y pierdo la cabeza, dejando hablar a mi interior, dejando al corazón al mando, como pocas veces ocurre, dejándole mostrar mi parte más débil, la que se contradice, la que deja de ser quien es por querer ser quien una vez fue intentando ser lo que es ahora. Y como digo, todo se vuelve negro y se desdibuja, desaparecen los márgenes y se esfuman las leyes de la lógica. O quizás todo sea exacto, frío, calculado, maquiavélico en su más hermosa expresión, sin sentimientos y tan perfecto, que escapa a la escasa comprensión de la que son poseedores la mayoría de los hombres. No sé si en estos momentos me vuelvo loca o genio, pero no me importa solo importa la nada que me oprime el pecho y que imprime en mi cara el gesto macabro que desfigura mis facciones. Me vuelvo la muñeca eterna que no siente, que no vive, que no ama, que no cree y que no piensa. Y luego vuelvo en mí y leo todo lo que escribo, sin reconocer ni una sola palabra y simplemente me convenzo de que no ha sido más que un momento de locura y que todo lo que digo no son más que invenciones dentro de un fantástico sueño. Solo un despiste en el que dejo al descubierto todo eso que encerré un día y dejé olvidado en lo más profundo del abismo con la esperanza de no volver a saber nunca más de ello. Las cosas salen a la luz solo cuando nuestro subconsciente se asegura de que podemos enfrentarnos a ello y, te lo digo de veras, puede llegar a ser horrible.

viernes, 21 de octubre de 2011

Otro pequeño momento de reflexión.

Dolor, desánimo y desgana, melancolía, nostalgia y como no, finalmente, impotencia...
Odio hacia esos momentos en los que lo único que quieres es gritarle al mundo lo que piensas, tu voluntad, tus deseos, gritarlo y que lo sepan todos, que se enteren de una puta vez de que estás ahí y de que a ti también te importa... y simplemente no poder hacerlo, porque no, porque no puedes, porque el miedo te lo impide.
Un amigo me dijo una vez, que la única barrera que tendría en la vida, es el miedo, y que solo superándola, sería capaz de hacer cualquier cosa... Pero nadie me dijo que hacerlo fuese fácil, y es que ciertamente, no lo es.
Es mucho más complicado abrirse hacia uno mismo, admitir lo que sientes y liberarlo, asumirlo y canalizarlo en lugar de luchar contra ello, ignorándolo, relegándolo a un segundo plano por miedo a enfrentarte a lo desconocido, o quizás a lago conocido, que sabes de sobra que va a salir mal.
Cuando vuelve el pasado, entremezclándose con el presente y soñando con el futuro, te perderás hasta el momento en el que te encuentres a ti mismo y comiences a salir, a rebelarte a ti y somo a ti lo que realmente piensas, y cuando dejes de bloquearlo dejarás de estar ciego, solo y perdido en medio de la nada.

Afronta tus miedos y tus realidades.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Momentos de flaqueza.

Cuando piensas que todo a pasado, que la calma ha vuelto y las lágrimas y el sufrimiento quedaron atrás, cuando crees que nada te afecta, es entonces cuando eres más vulnerable que nunca. Hoy he vivido una experiencia que demuestra que lo peor que uno puede hacer, es precipitarse sin motivo, sin tener nada claro, haciéndolo todo solo por acallar a la desesperación que martillea nuestra mente con constancia y tesón.
He comprobado que las mentiras duelen, pero duelen más aún si no luchas contra ellas, pujando porque la verdad salga a la luz, sino que simplemente, confías en ellas.
No pienso volver a dar un paso atrás, hoy se ha acabado todo. Miraré hacia delante, aunque no sepa que me depara el futuro, ya que es lo único que puedo hacer y aunque no lo fuese, es la mejor opción posible.
Quiero fingir que nada me afecta, tal y como creía antes, pero me siento incapaz de hacerlo.
Quizás lo mejor sería descansar, pero dudo que pueda ahora mismo, y menos aún con tantos sentimientos a flor de piel, sin saber realmente lo que significan.
Quién sabe, quizás necesite a alguien con quien contar, y aún sabiendo que no estoy sola, me siento incapaz de confiar en alguien y abrirme, revelando así todo lo que en su momento sentí, lo que siento y lo que soy. Simplemente no puedo, hay algo en mi interior me dice que no lo haga, y sé que así solo consigo hacer realidad el mayor de mis temores, puesto que me engaño a mí misma.
Este es el pequeño empujón que necesitaba para terminar de decidirme, y aunque no haya sido fácil, lo necesitaba. Voy a hacerlo y espero no equivocarme, puesto que las consecuencias podrían ser más que desastrosas.
No merece la pena seguir luchando por un sin sentido, voy a vivir para mí, y a dejarlo todo atrás, encerrado hasta el día en el que sepa como enfrentarme a ello.
No sé a quien va dirigido esto, quizás a Dios, quizás al destino o a una fuerza inhumana que simplemente juega con nosotros, seas quien seas, gracias. Gracias por hacerme darme cuenta a tiempo de lo que estaba haciendo, por abrirme los ojos y enseñarme el camino por el cual seguir adelante.

domingo, 28 de agosto de 2011

Uno más.

No saber apreciar algo hasta que te falta, utópico, lo sé. Echar en falta una palabra amable cuando la necesitas puede destrozarte por dentro y hoy más que nunca lo he comprobado. Puedo decir que después de varias semanas de relativa estabilidad he vuelto a sumergirme en las profundidades del pozo y lo veo todo jodidamente negro. Estoy esperando a alguien que venga y me saque aún sabiendo que no aparecerá y que como siempre tendré que salir sola, pero no me preocupa, ya no, he salido mucha veces sin ayuda. ¿Sabéis? Odio tener que venir aquí a desahogarme sin dejar nada en claro, y creedme que no lo hago por no tener a nadie, simplemente soy así, solitaria, desconfiada hasta la médula.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Reina del hielo, así es, fría.


¿Conoces ese querer y no poder? ¿Esa inseguridad tan molesta que surge cada vez que hay que tomar una decisión? Ella también la conoce, por supuesto, la conoce muy de cerca además, ese saber la solución y no poder llegar a ella o el simple hecho de desconocer como carajos conseguir lo que se quiere, el no poder salvar un obstáculo la exaspera. Le gusta manejar la situación, sentirse dueña y poder predecir el rumbo de la misma la hace poderosa, el conseguir lo que desea, pues es muy tozuda y nunca aceptará un no por respuesta. No hay cuestión que se le resista.
Sinceridad es su nombre de pila, pura, férrea y cruel, no le van las medias tintas.
Le cuesta abrirse ya que, aunque muchos lo ignoran, guarda un tesoro de dudosa firmeza, delicado cual rocío nocturno descubierto por unos pocos al amanecer en su interior, inigualable y único, nunca visto, del cual solo algunos son merecedores. Sería un crimen atroz exponerlo todo a la humanidad, arriesgarlo todo por nada. Y es que en estos tiempos que corren, ya no sabes de quien puedes fiarte, ya no sabemos distinguir entre cuerdos y locos, y ella mejor que nadie, lo sabe. Solo es una niña con mentalidad de guerrera. Ave nocturna, acecha en la noche, preparando sus movimientos.
Demuestra entereza, frialdad y es que se separa de su coraza en muy contadas ocasiones. Diosa del invierno, esa es su estación, pues puede ocultarse bajo su ropa y sentir como el frío intenta traspasar su fortaleza impenetrable sin éxito, sintiéndose entonces segura.
Rebelde y única, no le gusta lo cotidiano, ama ser el centro de atención y en ocasiones se siente ignorada, débil, frágil sola y rodeada de gente. Cree que nadie la conoce realmente y eso la confunde. Odia desmoronarse y sentirse vulnerable, sueña con tener a alguien con quien contar, un igual con quien reír, llorar y ahogar las penas, alguien capaz de escucharla sin juzgarla, alguien que sepa tratarla como se merece cuando lo necesita. Ansía cariño y comprensión, pero su orgullo y rebeldía le impiden buscarlos. Sobrevive como puede sin pedir ayuda y añorando que se la ofrezcan solo para poder rechazarla y así sentirse autosuficiente.
La melancolía la inunda por momentos, sabe disfrutar de sí misma, de su soledad. Profunda, su interior es un paraje de insospechadas dimensiones. Sencilla y complicada al mismo tiempo, teme implicarse demasiado y desilusionarse.
Quiere pruebas palpables, no le valen solo las palabras a no ser que estén escritas, soñando con la libertad del alma intenta capturar los momentos, instantáneas de su vida que poblan su mente, fotogramas que hacen perdurar esos instantes y su compleja belleza. Y es que solo ella sabe apreciar la belleza donde otros no son capaces de verla, es perfecta a su manera. Pocos saben distinguir lo cotidiano de lo inusual y ella amigos míos, ella es rara en su especie, escasa, criatura en peligro de extinción que se encuentra infravalorada. Aprende a amarla y te ganarás su respeto.


jueves, 28 de julio de 2011

Dulce dolor, amado por locos y odiado por cuerdos.

Es muy triste, ver como te vas  deshaciendo poco a poco, ver como todo lo que fue se esfuma y se pierde cual fuego sin combustible. Ver tu indecisión me quema, me duele y me malhiere.
En el fondo sé que no durará, que todo lo que te propones es efímero, pero tengo miedo, miedo de volver a caer en tus redes, de no saber defenderme y volver a ser débil, no quiero sentirme vulnerable y menos ver impotente como manejas todo tú, sin poder hacer nada para evitar el dolor que me provocas.
Sé que necesito un apoyo, ahora más que nunca, y también sé que no lo tengo, al menos como me gustaría. También sé que lo más probable es que todo sea un capricho, mera ilusión de un corazón roto pero, ¿qué importa ya? A veces me lo pregunto y no hallo respuesta, pues no quedan otros motivos que simples ilusiones por las que  luchar, y si por ellas he de seguir adelante, aunque sean ridículas, lo haré.
Me duele ver como te equivocas y sacas conclusiones equivocadas, como juzgas y te sientes superior al hacerlo sin darte cuenta de que eres solo un estúpido más del montón, un estúpido que en su momento fue especial y que pronto volverá a ser solo uno más, alguien que va a ser sustituido por otro estúpido, el cual volverá a intentar se alguien y que  probablemente fracasará como lo has hecho tú.
Necesito cariño, mucho más del que me han proporcionado nunca, y es que aunque no lo muestre abiertamente, estoy gravemente herida, y temo por mi vida, puesto que me veo incapaz de llegar a sanar.
Sé que con el tiempo todo cambiará, pero nunca he tenido paciencia y sé que ahora este hecho me exasperará hasta que lo haya perdonado todo y lo hay encerrado como la última vez. Me duele admitirlo, pero aún tienes mucho poder sobre mí, y por ahora lo mejor, es alejarse hasta que todo pase para poder resurgir.
Firmado:
Alguien cobarde y lastimado.

miércoles, 27 de julio de 2011

Por favor, os lo pido.

Dolor, miedo, inseguridad, traición, sobre todo esto último ha inundado mi vida últimamente, desbordando con falsas esperanzas el cauce que forma mi presente, obligándome a salvar obstáculos imprevistos, con los que como es obvio no contaba.
Siento que debo avanzar, algo en mi interior me empuja a ello, pero aún es demasiado pronto y por mucho que lo intento solo consigo hundirme más, regodeándome en la la hiel que inunda los recuerdos que están ligados a su nombre.
Olvidar y perdonar, eso solo son palabras. El alcohol es el único capaz de hacer olvidar y , perdonar amigo mío, eso es algo que solo hacen los locos y yo aún, no me incluyo entre ellos.
Me invade el rencor y me corroe el odio al verles, me da asco el pensar que hemos compartido todo eso y que ahora ya no valen nada esos íntimos momentos conjuntos, en los cuales ambos éramos vulnerables.
Sé que él solo es una sucia rata, que no merece ni si quiera la energía que derrocho al dedicarle estas palabras, pero aún así he de admitir que le quiero y le quise, y ese sentimiento aún late en mi pecho, reciente.
Sin embargo, no puedo negar lo innegable, aunque creerme amigos míos que lo intento. Y es que sé que siento algo por otro, no sé describirlo, y sé que si sigo ignorándolo será peor, pero no quiero admitirlo, no puedo aceptar que todo vaya tan rápido y menos teniendo en cuenta que él es para mí un desconocido.
Mente, cuerpo, alma, razón y corazón, por favor, dejad ya de jugar conmigo, que a base de indecisión y brusquedad, vais a romperme.


lunes, 10 de enero de 2011

Esos días...

Sí, esos días en los que sin saber muy bien por qué, te levantas con una gran sonrisa de oreja a oreja; esos días en los cuales piensas: '' Hoy todo será diferente''
Y no sabes por qué, pero lo piensas... y no eres el único, yo también lo he pensado, y también el chico qué se sienta a tu lado en clase, y tu compañero de trabajo, y la chica de la tienda de la esquina, y el conductor de la guagua... TODOS lo hemos pensado alguna vez... porque esa duda, ese algo que no sabemos que es, que nos incita a pensar... a imaginar, a soñar...
Ese quizás...
Porque quien sabe, quizás hoy se fijen en tí, quizás te respetarán, te tendrán en cuenta, se darán cuenta de lo mal que lo estás pasando, o de lo malo que has pasado, y te tenderán una mano amiga; quizás hoy te mostrarán el apoyo que necesitas para llegar a la cima; quizás esa persona te confiese lo inconfesable, y quizás...¿por qué no? Quizás ese gran amor surja o resurja y así sigues soñando porque HOY VAS A SER FELIZ!
Eso es, así muy bien, sigue soñando maldito y estúpido incompetente... no sirve para nada...
Pasan las horas, una pequeña pelea, un traspiés en la calle, no sabes por qué, pero hoy está saliendo todo mal, !NO ES POSIBLE!
Este iba a ser tu día perfecto, nada puede pararte, debes continuar, y así lo haces, nada ni nadie podrá borrar hoy tu sonrisa
Y finalmente, acaba el día, después de tanto agetreo, tanta rutina, todo ese estrés, todo lo que has aguantado, aún sigues con esa estúpida sonrisilla en la cara.... Es cierto, ahora está un poco desgastada, pero aún sigue ahí, y ahora, después de todo esto, de tanto caer y levantarte, de tanto soportar en un simple día sin que ocurriera nada diferente yo te digo D.E.S.P.I.E.R.T.A!
Y hazlo rápido, porque el tiempo se acaba, ¿acaso creías que iba a ocurrir algo nuevo y revolucionario por las buenas?
Reacciona de una vez!
Si quieres cambiar algo en tu vida ahora es el momento de hacerlo...
Porque ya sabes,
N.A.D.I.E se preocupará por tí si no te haces notar.
N.A.D.I.E te querrá si no te das a querer.
N.A.D.I.E creerá en tí si no les das motivos para hacerlo.
Y lo sé, es triste, pero así es esta sociedad en la que vivimos, corrupta...
Y nadie puede impedirte ser feliz, pero solo tú puedes conseguirlo, así que hoy te digo
B.R.A.V.O! Has sobrevivido a uno de esos largos y típicos días de rutina... Lástima que queden miles de ellos, ¿acaso quieres cambiar?
Pues deja de esperar a que venga un hada con una barita, o a que salga el genio de la lámpara y simplemente...
A.C.T.Ú.A!!!!!!